Hoy hice lo mismo y deje a Nicolás, claro que esta vez ya estaba preparada con mis llaves y ya me quede en la cocina.
Nicolás lloro por algunos minutos pero fue muy poco, lo escuche hacer el sr, patata, las figuras en la tortuga, el piano, burbujas, los perritos magnéticos y desde luego jugar a saltar y a correr.